La evolución de la tecnología ha transformado la manera almacenar información y acceder a diversas aplicaciones, una de ellas es la infraestructura cloud computing. Pero, ¿conoces lo que implica este concepto? En este blog, profundizaremos sobre esta tecnología que permite a las empresas acceder con rapidez a archivos almacenados y aplicaciones, incrementando así su eficiencia.
El término cloud computing infraestructura se refiere a la infraestructura tecnológica que hace posible que un usuario acceda a servicios y aplicaciones a través de internet. Los servicios que se pueden acceder en esta modalidad también se conocen como Infraestructura como Servicio (IaaS).
Con ayuda de la virtualización, esta tecnología separa los recursos almacenados en el hardware y los agrupa en la nube. De igual manera, emplea un software de automatización, en el que las herramientas de gestión distribuyen los recursos para que puedan ser utilizados por los usuarios.
La infraestructura cloud computing se conforma de varios elementos que trabajan en conjunto para crear una infraestructura tecnológica que responda ante las solicitudes de la empresa. A continuación, te compartimos los componentes de la infraestructura en la nube y el papel que desempeñan.
Contario a lo que se cree, la cloud computing infraestructura requiere la ayuda de un hardware para operar; pues la nube funciona en conjunto con los equipos físicos que se ubican en distintas locaciones de la empresa o en las instalaciones de los proveedores de servicios, por ello se necesita el uso de dispositivos como: conmutadores, enrutadores, firewalls, matrices de almacenamiento, así como dispositivos que facilitan la realización de backups o copias de seguridad.
La virtualización es un componente presente en la infraestructura cloud computing que, con ayuda de un hipervisor, se encarga de crear representaciones virtuales de máquinas físicas con el objetivo de imitar sus funciones y ejecutar máquinas virtuales.
Esta tecnología facilita la interacción con el hardware y elimina las limitaciones con respecto a la proximidad física, pues permite emplear la infraestructura de TI física de igual manera que una aplicación.
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El almacenamiento es fundamental dentro de la cloud computing infraestructura, debido a que almacena la información de la empresa. Este elemento es el que le ayuda a la nube a cumplir uno de sus principales propósitos, que es aumentar o disminuir su capacidad dependiendo las necesidades de los usuarios.
Si se realiza una correcta gestión del almacenamiento se pueden prevenir pérdidas de información, pues solo así se garantiza el correcto respaldo de los archivos y documentos guardados.
La red de una infraestructura cloud computing está conformada por una serie de cables, conmutadores y enrutadores. Su importancia radica en que estos equipos realizan la conexión de datos y aplicaciones almacenadas en varios servidores.
La red informática hace posible que los colaboradores accedan de manera remota a la información que necesitan, pues cuando se requieren los recursos de la nube, estos son enviados a la red conocida como internet.
Existen tres tipos de cloud computing infraestructura, para que tanto empresas como personas hagan uso de los beneficios del servidor en la nube.
La nube pública es un modelo de infraestructura cloud computing de acceso compartido, pero que es propiedad de un proveedor de servicios. Generalmente, las empresas pequeñas deciden arrendar este tipo de infraestructura, porque solo requieren un espacio limitado de almacenamiento y el acceso a este servicio tiene un costo bajo en comparación a las otras opciones.
La infraestructura cloud computing privada—también conocida como nube corporativa—es propiedad de una organización, por lo que esta posee su total administración y gestión. Las nubes privadas brindan más beneficios que las nubes públicas, por el hecho de que no se comparten recursos con otros usuarios.
Este modelo de cloud computing es ideal para empresas grandes y corporativos, debido a que requieren mayor privacidad y volumen de almacenamiento.
La nube híbrida es un modelo que permite la ejecución de aplicaciones con el uso simultáneo de la nube pública y privada. Este tipo de infraestructura cloud computing hace posible la migración de información y la gestión de operaciones de la empresa.
De acuerdo a un artículo de Microsoft, la seguridad en la nube híbrida evita la redundancia de datos automatizada, además brinda un alto nivel disponibilidad y ofrece soluciones para prevenir riesgos que ocasionan la pérdida de datos.
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La infraestructura cloud computing es un gran aliado para las organizaciones, pues ofrece ventajas que benefician a múltiples áreas y departamentos de una empresa. A continuación, te explicamos cuáles son:
La segunda tiene que ver con el mantenimiento en la nube. Cuando se renta por este servicio, es común que se incluyan servicios de mantenimiento correctivos y preventivos, y estos son realizados por la empresa proveedora que ofrece el servicio. Esto quiere decir que los colaboradores de la empresa no tienen que invertir tiempo y esfuerzo en realizar dichos mantenimientos, y pueden enfocarse en otras actividades.
Si estás considerando implementar la infraestructura cloud computing en las operaciones de la empresa, te recomendamos solicitar el asesoramiento de proveedores especializados, pues su experiencia te brindará una visión distinta de la situación.
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