Los servidores ayudan a mantener la seguridad de tu empresa, así como mejorar sus operaciones. Descubre qué es un servidor y cómo funciona.
Hoy en día muchas de nuestras actividades de trabajo que se realizan desde un ordenador y/o al conectarse a internet, requieren de un servidor. Por ello, las empresas dependen del 90% de este equipo informático para que sus operaciones funcionen correctamente.
Si todavía no sabes qué es un servidor y cómo funciona, debes leer este artículo.
Un servidor es un equipo informático y de tecnología diseñado para almacenar información y distribuirlos entre los equipos que estén conectados a él (red de ordenadores o computadoras).
Están diseñados para soportar mayores cargas de trabajo y para que diferentes usuarios puedan acceder en cualquier momento a los recursos de una misma organización (software, datos, etc.)
Los servidores funcionan para trabajar en sistemas de red y dar servicio a otros equipos.
Un servidor funciona de dos formas, como un hardware o un equipo físico que está integrado a una red informática, y como un software que se refiere al programa que ejecuta el dispositivo para realizar una o más tareas en específicas.
Sin embargo, para que un servidor funcione correctamente, este debe estar configurado de acuerdo a las solicitudes del cliente. Es decir, un servidor funciona en un modelo “cliente-servidor”. El cliente puede ser tanto un ordenador como una aplicación que requiere información del servidor para funcionar. Por lo tanto, un servidor ofrecerá la información demandada por el cliente siempre y cuando el cliente esté autorizado.
Por ello, es importante que los servidores funcionen 24/7, es decir, que estén en espera permanente y a disposición del cliente que demanda su asistencia. Además, que puedan atender a varios clientes a la vez de manera independiente.
Los servicios que brinda un servidor son ejecutados continuamente. Por lo tanto, la mayoría de los servidores nunca se apagan. Si un servidor dejara de funcionar, ocasionaría muchos problemas a los usuarios. Por ello, los servidores están programados y diseñados para evitar fallos.
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